Comienza el nuevo año y resulta normal para muchos tomar mejores decisiones con respecto a la salud y el estilo de vida. Sin embargo, las buenas intenciones suelen fracasar cuando no se acompañan de prácticas conscientes que pronto se conviertan en hábitos positivos. Tener una vida saludable es posible, solo debes ir haciendo cambios paulatinos.
Muchos de los hábitos que mencionaremos a continuación tienen que ver con mantener una dieta saludable, la cual es fundamental para estar sano, prevenir enfermedades y conseguir más años de vida.
Los mejores hábitos para una vida saludable
Comidas equilibradas
Tus comidas deberían repartirse de la siguiente manera: una mitad compuesta por frutas, vegetales o verduras. Una cuarta parte carbohidratos y la otra cuarta parte proteínas. Los vegetales siempre pueden ir en aumento, mientras las demás partes pueden disminuirse sin riesgo, pero siempre deben estar presentes.
Aceites vegetales
Utiliza los aceites vegetales como fuente de grasa prefiriendo el aceite de oliva, evita las grasas trans, natas, margarinas y mantequillas.
Menos azúcar
Reduce el consumo de azúcar refinada en todo tipo de productos comestibles y opta por los sustitutos naturales como la Stevia o Fruta del Monje. Los jugos o zumos tómalos sin endulzarlos y aprovecha el dulce natural de la fruta madura.
Cuidado con los hidratos
Escoge más los hidratos de carbono que no estén procesados y que no tengan azúcar añadido y come dulces con moderación. Las galletas, bizcochos, chocolate y pasteles suelen tener una versión más saludable.
¿Y las proteínas?
Incluye en tu dieta más proteína de origen vegetal y elige carnes magras bajas en grasa como el pescado y las aves.
Menos sal
Sazona con más especias como el Pimentón de La Vera, salvia, pimienta, jengibre, cúrcuma, curry… Con esto disminuir el uso de la sal será más sencillo.
Actividad física
Haz ejercicio al menos 3-4 veces a la semana. Establecer una rutina de mínimo 20 o 30 minutos de actividad física tendrá un impacto muy positivo en el desarrollo y fortalecimiento de músculos y huesos. El resto de los días igual mantente activo.
Come más, menos cantidad
Toma meriendas saludables a media mañana y a mitad de la tarde. Algunas opciones son una fruta, un batido, zumo o té, una galleta integral, yogurt, entre otros.
Hidrátate
Bebe mucha agua al día, al menos un litro al día, ideal dos. El agua refresca y depura el cuerpo de toxinas, acelera el metabolismo y ayuda a la pérdida de peso.
Menos procesados
Aléjate de cualquier comestible procesado, con añadidos químicos, colorantes o conservantes. Prefiere siempre las opciones orgánicas y naturales.
Alcanzar un estilo de vida lleno de bienestar requiere dejar que el cuerpo y mente se adapten a los cambios e ir modificando los regímenes alimenticios para encontrar un equilibrio donde no existan las privaciones, sino el disfrute a una alimentación sana que igual puede ser deliciosa y divertida.